La octava edición del concurso «El muro que libera» contó con la participación de 143 personas privadas de la libertad. Se realizaron 49 murales, distribuidos en 19 unidades de toda la provincia.
70 proyectos de muralismo y arte urbano fueron seleccionados en noviembre pasado en el marco del Concurso Federal de Muralismo, organizado y coordinado por el Ministerio de Cultura de la Nación a lo largo de todo el país.
«Pasaron casi 100 años del proyecto mexicano que signó la producción del muralismo posterior en la región y el país. Resulta evidente que las motivaciones, las expectativas, los espectadores, la cultura visual y el contexto que llevó a actuar a los muralistas de la tradición que acabo de mencionar, han cambiado. Ahora, ¿los muralistas asumieron que han cambiado? ¿Cómo se traduce eso en sus prácticas e imágenes? ¿Están logrando estas imágenes interpelar a públicos masivos, bombardeados por publicidades y variados estímulos que reciben, por ejemplo, del multitask del celular? ¿Sigue siendo el muralismo una práctica legítima y eficaz para hacer política, construir identidad y comunicar valores como lo hicieron antaño otras experiencias en América Latina?», Ignacio Soneira.